Los habitantes de la Velocidad

Fernando Ocaña presentó su primera exposición individual en la Ciudad de México. Comprendida por una selección de fotografía, la proyección de un largometraje y la presentación de un libro, Los Habitantes de la Velocidad lanza una mirada antropológica hacia el trayecto.

Al observar la experiencia transitoria del viajero, el artista mexicano explora cómo la aceleración ha influenciado las formas del territorio y la conducta colectiva. Su obra profundiza en los patrones sociales y las narrativas subconscientes detonadas por el movimiento en la vida diaria. Los Habitantes de la Velocidad invita a reconsiderar la imagen estática de la ciudad e incorporar en cambio una en movimiento – a preguntarnos: ¿Qué es este fenómeno tecnológico que nos ha transformado socialmente? ¿Qué es este territorio de la estética engendrado por el automóvil? ¿O, quizá, simplemente, qué es lo que tanto nos fascina, al mirar el paisaje borrarse detrás de la ventana?

La exposición se inauguró el jueves 15 de marzo en Momoroom. JUNKSPEED, un largometraje que retrata a la Ciudad de México a través de la movilidad, se proyectó en Cine Tonalá el sábado 17 de marzo de 2018.

La velocidad se convirtió en el escenario en el que existimos. El parabrisas, el filtro a través del cual nos observamos. La aceleración ha distorsionado nuestra percepción del tiempo y el espacio. La imagen de la ciudad, así como las cualidades formales de la materia, dejaron de ser estáticas. El automóvil, la intersección, el embotellamiento. Se transformó nuestra forma de pensar en el entorno. Borrosos fondos. Detalles desaparecidos. Una nueva estética refuerza nuestra imaginación. El esparcimiento de una vida de trayectos. La geografía de ningún lugar. Una nueva especie ha nacido. Nuestro movimiento esculpe la forma, el ritmo y el paisaje. Somos los habitantes de la velocidad.